martes, 28 de abril de 2009

Mi primera vez

Perdí mi virginidad un 26 de Diciembre de 2007, a las 03.30 de la madrugada. A los quince años, un momento así no se puede olvidar nunca.

La gente tiene la necesidad de poner nombres a las cosas, de simplificarlas con palabras, pensando así, equivocadamente, que las puede comprender. Yo, en cambio, intento comunicar cada vez menos con las palabras, y más con el cuerpo.

Si queréis ponerme un nombre, ¡adelante! ¡No me importa! Pero sabed que lo que soy en realidad, es un alma libre, sencillamente.



Siempre me he rodeado de gente mayor que yo, me siento muy agusto e integrado. Debido a esto, he sido muy precoz para ciertos aspectos en la vida de un adolescente y debido a la separación de mis padres, tenía aún más libertad para poder hacer lo que me viniese en gana. A los 15 años empecé a salir de fiesta durante la noche madrileña y gracias a que aparento más edad, no me han pedido el DNI en la puta vida.

Un fin de semana hubo una quedada con varias amistades del mismo círculo, que lo compone gente de diversas partes de España. Pero a mí, a quien más me interesaba ver ese día, era a D. Le conocí el día de su cumpleaños, justo hoy hace dos años, en otra quedada. Desde el primer momento conectamos bastante, y de ahí surgió una gran amistad, a distancia, pero una gran amistad. Siempre que venía a pasar unos días a Madrid, nos veíamos y, como siempre, lo pasábamos genial. Además, al igual que yo, es una chica muy liberal.



Mierda, me he quedado dormido. Como rápidamente, me ducho, me pongo como siempre lo primero que pillo y ¡hasta luego Mamá! Pillo el primer bus que encuentro hacia Madrid, aún me queda un largo camino hasta llegar a Alcobendas desde mi pueblo. Me recorro todo el metro hasta llegar a la punta opuesta de Madrid. Y cuando llegué al sitio de la quedada, allí estaba ya ella, en el suelo, tirada comiendo arroz. Al verla me lancé hacia ella como si hubiese estado en un desierto vagando durante tres días muerto de sed, y de pronto encuentro un oasis. Al menos, cuando la sentí entre mis brazos, me dí cuenta de que no se trataba de un espejismo.

Pasó la tarde, reíamos, nuestra amiga N decía sus maravillosas frases celebres como "estoy hermética", cuando en realidad quería decir "estoy histérica". En fin, fue una buena tarde. De repente, comenzó el tonteo por parte de D hacia mi. En ese momento, supé que, en un momento u otro, acabaríamos liándonos.

N, D y yo nos dirigimos al VIPS, para comprar preservativos. A la noche todos nos iríamos de fiesta, y teníamos que ir preparados. Nos sajaron la vida por ellos, 9 euros. Nunca compréis en el Vips, al no ser que caguéis dinero.

Entonces D me dijo al oído... "De esta noche no te libras, no tienes excusa".



Al llegar a Villalba de noche, nos dirigíamos donde normalmente hacíamos botellón, denominado por mi como La Roca. Pero de la estación a La Roca hay un buen trecho, gracias a dios, G apareció con su coche e instantáneamente me introduje en él.

Mientras esperábamos a que los demás llegasen, nosotros empezamos a beber. Una vez llegaron todos, comenzó la perversión. Nos reíamos, nos besábamos unos con otros... Y D acabó acercándose a mi y dijo... "Acompáñame a mear..."

Me agarró de la mano y sólo me reí. Íbamos demasiado alcoholizados. La Roca, se llama así por ser nada más y nada menos que una elevación montañosa, en la que si puedes correr riesgo de matarte estando sobrio, ebrio ni te cuento. Total, empezamos a separarnos del grupo, cuando de repente ella tropezó y yo con ella...

Caí tumbado encima de ella, y de repente comenzamos a darnos un profundo y largo beso, seguido de caricias fuertes y salvajes llenas de pasión. Fui bajando dándole besitos por el cuello... Entre sus senos... Le bajé el pantalón, y ahí comencé a hacerle un cunilingus, al principio sin acertar he de admitir, ya que ella decía "Más abajo...". Posteriormente empecé a masturbarla con mis dedos... Tras unos 10 minutos, nos dimos cuenta de que seguíamos muy cerca del grupo y que, C, incluso nos había visto.

Esto no nos freno, solo seguimos bajando la montaña, sin parar de besarnos y reírnos y lo retomamos donde lo habíamos dejado. Me estaba quitando la camiseta cuando de pronto escuchamos "¿Hola?"
Se trataba de A y J, que a pocos metros de nosotros estaban realizando el acto sexual.

Solamente nos reímos, y cada uno siguió a lo suyo. Estuve un rato masturbándola cuando de repente oímos desde lejos un ¡¡Nos vamos!!. Se terminó la diversión. Nos vestimos y nos dirigimos hacia donde se encontraba el grupo.

Llegamos, y eramos el centro de todas las miradas. "Tienes sangre en el cuello", me dijo C. Está claro que se trataba de un chupetón. "Nos has visto, verdad?", le dije. Y no encuentro la explicación al por qué acto seguido de decirme eso ella se lanzó a besarme. Yo no frené el beso. Al rato, estaba tirado en el suelo con F y D al lado. A causa del alcohol, no recuerdo nítidamente nuestra conversación, solo sé que los tres acabamos besándonos mutuamente. Era excitante, la gente nos miraba y eso me animaba a seguir.

Hora de irse. Pero antes, tuve que acompañar a D a que vomitara, demasiado vodka en vena. Bajamos con cuidado la peligrosa montaña, y nadie se mató, milagrosamente. Caminamos... Hasta llegar al local donde siempre acabábamos. Al entrar, ella dijo... "Voy a entrar en el baño de las chicas, ahí te espero".

Se metió, y a continuación entré yo también. Allí dentro estaba N y Noe. Noe se quedó impactada, N tan solo dijo: "Bueno, al menos vosotros aprovecharéis los condones". Pobrecilla, tiene un novio que esta bastante bueno, y no la satisface...

Y ahí me encontraba yo, con D, en los baños de una discoteca, esta vez dispuestos a terminar lo que antes habíamos comenzado. La empuje contra la pared, y comencé a besarla mientras la masturbaba... Ella estaba muy excitada, y yo he de admitir que también. Tras realizarnos sexo oral mutuamente, pasamos a la penetración. Se apoyó contra el water, dándome la espalda y teniendo una buena visibilidad de su sexo. No estaba bien depilada, así que seguramente no tenía intenciones desde el principio de que esto pasará, han sido cosas que el destino ha decidido. Al principio la penetraba de forma suave mientras me acercaba a su nuca y le comía la oreja. De repente ella dijo "Dame fuerte".

Sin contemplación empecé a penetrarla de forma fuerte y rápida. Es increíble lo bien que me desenvolvía para ser la primera vez. Siempre pensé que en una relación sexual los nervios me fallarían y acabaría eyaculando rápido. Qué equivocado estaba. Pasaba el rato, yo seguía penetrándola apasionadamente mientras ella gemía de placer y gritaba "No pares".

Media hora... Una hora... Una hora y media...

Entonces ella se separó y se agachó hasta encontrarse con mi miembro. Comenzó a masturbarlo hasta que eyaculé. "Me ha sorprendido el aguante que has tenido", me dijo.

Nos vestimos, y los dos salimos del baño, como si nada hubiese pasado. Éramos la comidilla. A los 5 minutos cerraron el bar, y todos nos dirigimos a la renfe. No comentamos el tema esa noche de vuelta a nuestras respectivas casas, y al día siguiente, ella se fué de vuelta a Barcelona. Días después del suceso, ella y yo hablábamos del tema riéndonos de lo que pasó. Desde luego, cómico era.



Hoy la he llamado por teléfono. "Hoy es tu cumpleaños, ¿no?". Estaba en lo cierto, me ha gustado saber de ella, aunque hemos hablado poco. La semana que viene hará una visita a Madrid, así que nos veremos e iremos de fiesta.

Me pregunto si alguna vez se repetirá lo que ya hicimos en el pasado.

2 comentarios:

  1. Primerooo en estrenar la sección de comentarios! :P

    Bueno, decirte que eres un crack describiendo la realidad y que espero que estoy siga igual de interesanteee! xDxD Suertee!


    Un besote enorme feooo!! muaaa


    By: BuBuS! ^^

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  2. peero libee! esto esta geniaal tio!
    dedicate a esto xqqqe aqui ai madera!
    jajaja.
    bueno puues esoo libe q me a encantadoo ( L )
    un besitoo caari!

    Byy: andreiitaa!

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